tag:blogger.com,1999:blog-6360998355283648111.post4784456087678578110..comments2023-09-28T13:31:12.024+02:00Comments on Rara Temporum: Transformation theologyBernardo Pérez Andreohttp://www.blogger.com/profile/06316740853208677171noreply@blogger.comBlogger2125tag:blogger.com,1999:blog-6360998355283648111.post-18896911388729728642011-03-13T08:48:28.677+01:002011-03-13T08:48:28.677+01:00Efectivamente, Desiderio, la reflexión cristiana n...Efectivamente, Desiderio, la reflexión cristiana necesita de los procesos encarnacionales para poder hablar con el mundo en el que está inscrita, pero la crítica de Janz al discurso de Regensburg es que huyendo del relativismo cae en él en el momento en el que da absoluta prioridad a un momento encarnacional concreto. Además, cae en el dogmatismo en el mismo momento de la absolutización de lo relativo o concreto. Este es el núcleo de la crítica, núcleo que comparto porque el a contecimiento de la encarnación constante de la fe es imprescindible, pero por ello mismo no podemos absolutizar ningún momento aunque los primeros momentos puedan ser normativos, como afirmaba Lluís Oviedo en la respuesta a Janz.Bernardo Pérez Andreohttps://www.blogger.com/profile/06316740853208677171noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-6360998355283648111.post-28593467585023387762011-03-13T00:32:00.569+01:002011-03-13T00:32:00.569+01:00No hace mucho leí un texto de Cantalamessa que pre...No hace mucho leí un texto de Cantalamessa que precisamente ponía de manifiesto esta inversión que comentas, que el denomina el paso del esquema carne-espíritu al de espíritu-carne. Según él, en un principio —en referencia a Jesucristo— lo que interesaba no era tanto la naturaleza de Jesucristo como su condición, su modo de comportarse y de existir, primero en el tiempo y después fuera del tiempo. Interesaba más la existencia que, digamos la esencia (yo creo que en este sentido tenemos que aprender mucho de la interpretación judía veterotestamentaria). Y como se comenta en el post, con la introducción del cristianismo en la cultura griega se invierte el esquema, otorgando mayor relevancia al ser, a la esencia inmutable de las cosas, antes que a su devenir o a su historia. Supongo que esta ha sido una influencia no sólo en el pensamiento cristiano, sino en toda reflexión intelectual occidental, por lo menos hasta que se ha empezado a hablar en la filosofía contemporánea de la existencia, de lo vital, etc., con lo que parece que se trata de recuperar esa nota de proceso, de devenir, inherente a lo humano.<br />Lo que yo no veo tan descabellado es esa identificación entre el logos y el Verbo. Sí, si efectivamente se convierte en un mundo de ideas sin ningún tipo de conexión con lo humano, como comentas. Pero creo que si bien se ha acentuado en algunas épocas esta componente estática y esencial, nunca se ha olvidado en la tradición cristiana, precisamente, su condición de cristiana, esto es, que en Jesucristo se produce ese punto de conexión entre lo divino y lo humano, punto sin el cual nos sería imposible acceder a Dios.<br />Yo creo que esos dos aspectos de la razón, para nada son incompatibles. El segundo indicaría esa comprensión del universo, sin la cual el mundo sería ininteligible. Y el primero, pues nuestra herramienta para acceder a esa comprensión, aunque esa herramienta esté condicionada por nuestra biología y se haya desarrollado al modo que comenta Lorenz, en adaptación evolutiva a ese mundo que pretende comprender. Yo interpreto así esa frase de que la razón metafísica condiciona nuestro pensamiento.<br />Y ya para acabar, comentar que yo no sé si cuando este teólogo dice que al utilizar la herramienta histórica griega se está cayendo en un relativismo es una crítica acertada (por lo menos hasta donde yo llego a alcanzar). Lo digo en el sentido de que si lo que estamos defendiendo es el aspecto histórico de la teología, ¿no es lo normal que se utilicen herramientas humanas que necesariamente se han de dar en el tiempo? Desde nuestra condición humana, tenemos que expresar aquello que entendemos absoluto con nuestras herramientas, concretas, temporales, imperfectas,… Y no por ello se ha de caer necesariamente en un dogmatismo —otra cosa es que se caiga— sino que simplemente actuamos como humanos. De hecho, supongo que con el devenir de la historia se irán corrigiendo —iremos corrigiendo— lo que entendamos que sean defectos que arrastramos del pasado, mediante nuevas herramientas, nuevos planteamientos,… todos ellos concretos y humanos.<br />En fin, perdona por la extensión.Desiderionoreply@blogger.com