Por cierto, el geolocalizador también me dio información sobre una serie de visitas procedentes de Mountain View en Califronia, exactamente de Naval Air Station, Moffett Field. Si los inquilinos de aquel lugar leen esto, ruego se pongan en contacto conmigo. Me gustaría poder charlar con tan asiduos visitantes del blog. A ver qué inquilinos contestan antes, si los de la base naval y aérea del ejército americano o el de la lápida innominada.
miércoles, 24 de marzo de 2010
Una visita de ultratumba
No hace muchos días publicaba Martín Gelabert un post sobre unas voces del más allá. En él se refería a ciertas declaraciones de un exorcista que decía mantener regulares conversaciones con el demonio, con la Virgen o el mismo Cristo. Yo no he tenido tamaña experiencia, pero quiero compartir con los asiduos lectores de este blog otra que puede resultar interesante. Seguramente todo se deba a una pequeña confusión de la tecnología, pero hace tres días, el geolocalizador de visitas que tengo instalado en el blog me señalaba una visita proveniente de Los Ángeles, California. Al acceder en el mapa, con una resolución magnífica, pude observar para sorpresa mía que la conexión procedía de un cementerio que está en el casco urbano de la ciudad, el National Cementery of LA. Aproximándome más aún pude diferenciar una de las lápidas del recinto. Hay que decir que el cementerio es el típico americano, con lápidas en el suelo y de gran extensión. Pues bien, me quedé con las ganas de haber leído la inscripción de la lápida, más que nada por conocer el nombre de tan ilustre lector del blog, porque he tenido muchas visitas, pero nunca una desde una lápida. Si el extraño inquilino lee el blog me gustaría que dejara algún comentario y de paso nos resolviera algunas dudas escatológicas que rondan aún por los pagos teológicos sin resolver. Sería bueno saber si tiene sentido hablar de una escatología de doble fase, si lo que viene tras la muerte es pervivencia del alma o hay algún tipo de corporeidad, si se trata de un estado de soledad orante o se parece más al botellón... y algunas cuestiones más que ahora no se me ocurren.
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4 comentarios:
Supongo que eso de la visita procedente de Los Angeles hay que tomarlo con un poco o un mucho de humor. Por otra parte me sorprende tanta precisión en un contador de entradas. A lo mejor era un pariente del difunto que se entretenía con un portátil. Eso de la informática parece, a veces, más misterioso que el Misterio Trinitario. Y ya puestos: ¿cómo ha desaparecido el comentario que sí estuvo publicado en tu anterior post? Saludos
Perdón: no ha desaparecido el comentario, pero lo que sí aparece al final del post anterior es: "0 comentarios".
Pues sí, Martín, esto de la técnica es muy misterioso. Lo de "0 comentarios" no sé a qué se debe. Lo del cementerio puede ser lo que tú apuntas, pero ya es tener ganas irse con el portátil al cementerio.
Lo de la precisión no te extrañe, Contadorwap lo hace, pruébalo y verás.
Saludos
Quizás un cementerio sea un lugar adecuado para despojarse de todo el maniqueísmo extraterrenal que queremos achacar a lo divino (con sus dioses y sus demonios y sus vírgenes...) y recordarnos que las cosas de Dios son mucho más mundanas y terrenales de lo que nos quieren hacer creer. Siempre me he preguntado ¿Por qué hace falta preguntarle al demoño, que según dicen habla en lenguas que nunca ha conocido ni estudió, o a los espíritus que pululan por ahí? Te aseguro, querido Bernardo, que con preguntar a los que sufren (o leerte a ti) obtenemos respuestas de sobra para lo del bien y el mal. ¡Anda, si eso es lo que dice el Evangelio! :)
Por cierto, aviso. Yo, cuando me muera, no me conectaré a este blog pero, y sobre todo, que a nadie se le ocurra "llamarme" desde la tierra pues estaré retozando en el gozo eterno de los abrazos del Dios Padre-Madre y, la verdad, es que no me va a venir bien "contestar".
Saludos terrenales.
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